"Lost in translation"es una película estadounidense, en coproducción con Japón, de 2003, de la directora Sofia Coppola, y que he vuelto a ver a propósito de un reciente viaje a Japón.
La película recibió el Oscar al mejor guión original, de la misma Sofia Coppola, varios premios Globos de Oro, y Bafta, entre otros.
Bob Harris, un conocido actor, en crisis personal y profesional (Bill Murray), viaja a Tokyo para hacer un anuncio de whisky japonés, En el bar del hotel, donde pasa gran parte de su tiempo libre, se encontrará con Charlotte (Scarlett Johansson), una joven casada con un fotógrafo que ha ido a hacer un reportaje a Tokio, y que pasa mucho tiempo sola. A pesar de la diferencia de edad se establecerá entre ellos una gran complicidad, unidos por la soledad y la vorágine de una ciudad como Tokyo, que aparece como un tercer personaje, vista muchas veces desde las plantas altas de los edificios, con calles deslumbrantes de neones y gente que se cruza en los pasos de peatones. El mundo de la noche, los karaokes, los locales de máquinas de juego...
A destacar la actuación de S. Johansson y de Bill Murray, este con su eterna expresión de estar siempre ausente, la doble relación que se establece por un lado entre los dos protagonistas -sugerente y llena de matices- y por otro, la relación de ellos, extranjeros occidentales, con respecto a una ciudad tan fascinante y ambigua como Tokyo, cuyo ambiente Coppola recrea de forma auténtica (nuestra experiencia personal así lo confirma), eso sí, siempre desde la mirada del de fuera.
Te la iba a recordar pero veo que no hace falta.
ResponderEliminarUn beso, mi amor.
Que te mejores.