(Detalle de la obra)
"Recordad el cuadro de Gisbert: la noble fraternidad ante la muerte de aquellos tres hombres cogidos de la mano" Antonio Machado: "Nuestra Bandera" 1938
Se cumplen 200 años de la creación del Museo del Prado, en 1819, y 150 de la nacionalización de las colecciones reales y la incorporación de los fondos del Museo de la Trinidad, bajo la dirección de Antonio Gisbert, en 1868. A partir de esta fecha estas colecciones pasaron a depender del Estado, y el Prado se convirtió en Museo Nacional de Pintura y Escultura.
El Museo del Prado ha querido conmemorar ese aniversario con la exposición "Una pintura para una nación. El fusilamiento de Torrijos que gira en torno a esta obra emblemática del pintor alcoyano Antonio Gisbert (1834-1901), autor también de una obra comprometida con las libertades: "Los comuneros Padilla, Bravo y Maldonado en el patíbulo", de 1860.
"Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en las playas de Málaga", (1888), es la única pintura de historia que el Estado encargó con destino al Prado, bajo el gabinete liberal de Práxedes Mateo Sagasta en 1886, y que se convirtió tanto en un símbolo de defensa de la libertad contra el absolutismo de Fernando VII, como un canto a los héroes de la independencia.
El general José María Torrijos (1791-1831) fue un militar de prestigio internacional, que luchó en la guerra de la Independencia contra los franceses, defensor de la integridad de la nación y de las libertades y que, acusado de alta traición y conspiración, fue fusilado sin juicio previo junto con otros compañeros, por orden de Fernando VII en 1831.
La obra de Gisbert, que pertenece a la colección del Museo del Prado, ha sido recientemente restaurada, y se presenta ahora, acompañada del boceto previo y otros documentos, en la sala 61 A del edificio Villanueva, adquiriendo una importante visibilidad.
Es un óleo de gran formato: 390 por 601 centímetros, con imponentes figuras de casi dos metros, que representan a Torrijos, el antiguo presidente de las Cortes, Manuel Flores Calderón, el exministro de Guerra Francisco Fernández Golfín y el teniente británico Robert Boyd entre otros.
La parte central de la obra la ocupan Torrijos, que da la mano a dos de sus compañeros y que, junto con otros, está esperando en pie su ejecución en la playa de San Andrés de Málaga.
Por detrás de ellos, en último término, aparece el pelotón de fusilamiento, y en el horizonte los montes de Málaga y la iglesia de la Virgen del Carmen.
En primer plano, tendidos en la arena, los cadáveres de liberales ya fusilados; de algunos de ellos sólo vemos una mano y su chistera de piel.
La obra, de estilo naturalista, pero también épico por su monumentalidad, transmite una emoción contenida de unos hechos trágicos y, junto con otras como "Los fusilamientos del tres de mayo" de Goya, se ha convertido en símbolo de lucha por la libertad.
Homenaje merecido a un pintor y a una obra que sobrecoge en su visión directa. Se podrá visitar hasta el 30 de junio de 2019.
Antonio Gisbert: Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en las playas de Málaga 1888 (óleo sobre lienzo)
Antonio Gisbert: Boceto del Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en las playas de Málaga 1886/1887
"Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros..." (detalles)
Antonio Gisbert: Los comuneros Padilla, Bravo y Maldonado en el patíbulo" 1860
(óleo sobre lienzo)
Ángel Saavedra (duque de Rivas): El general Torrijos 1824-25
Monumento a Torrijos. Plaza de la Merced, Málaga
Museo del Prado, Madrid
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